CONOCER EL AMOR
DE CRISTO
DE CRISTO
“Seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad, y la altura, y de conocer el amor de Cristo que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios”
(Efesios 3:18-19)
(Efesios 3:18-19)
Ciertamente se crece en el conocimiento del universo, pero, así como el conocimiento humano crece, el universo sigue y sigue expandiéndose en su anchura, longitud, profundidad y altura como si esa fuese su manera de decir: “nunca llegares a conocerme en profundidad. Cuánto más creías conocer más os dais cuenta de cuán poco conocéis”. Ahora bien, con toda y la grandeza de sus medidas, las dimensiones del universo palidecen frente a la grandeza de las dimensiones del amor de Cristo hacia los suyos. Un amor que no es abstracto sino definido pero un amor que excede todo conocimiento posible. Es precisamente este amor de Jesucristo el que el apóstol Pablo quería que la iglesia de Éfeso llegase a conocer y por esa razón oró por ellos “seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios” (Efesios 3:18-19). Las palabras del apóstol dejan ver una cierta paradoja. Por un lado, el apóstol ora para que esos creyentes sean capaces de comprender el amor de Jesucristo, un amor que puede ser comprendido plenamente pero que, por otro lado, es un amor que no puede llegar a conocerse porque excede a todo conocimiento. Por tanto, hay tres cosas importantes en las palabras del apóstol, primero la comprensión del amor de Cristo de manera congregacional. Segundo, el conocimiento pleno del amor de Cristo y tercero, el propósito de comprender y conocer el amor de Cristo.
Las palabras del apóstol Pablo en Efesios 3:18-19 forman parte de una oración que empieza en el v.14. Pablo dobla sus rodillas delante del Padre y ora por esos creyentes gentiles en Éfeso. Sus peticiones son varias, pero un de ellas aparece reflejada en los vv.18-19. Pablo ora por conocimiento para esos creyentes. La petición del apóstol se centra en que “seáis plenamente capaces de comprender” y “de conocer”. Por tanto, la petición del apóstol es vista en esas dos menciones de ser capaces de “comprender” y de “conocer”. El apóstol pide a Dios por conocimiento y es que el conocimiento es algo vital en la fe bíblica. La fe bíblica nunca es una fe ausente y carente de conocimiento, nunca es una fe que deja su cerebro en la puerta como si fuese algo incompatible con ella y deja que sean únicamente los sentimientos y afectos aquellos que gobiernen. La fe bíblica surge siempre de la revelación que Dios ha dejado en su palabra, la fe surge por el oír la palabra de Dios (Romanos 10:17). Por tanto, aun y cuando los afectos tienen su lugar siempre regidos por la palabra de Dios, la fe bíblica es una fe racional ya que surge, crece y madura a partir del conocimiento y comprensión de la revelación bíblica. Es por esto por lo que Pablo pide por conocimiento y comprensión. El amor de Cristo que será aquello que deberá de ser comprendido y conocido, no es un amor que será únicamente entendido por medio de sentimientos sino también por medio de conocimiento el cual deberá ser dado no de manera individual sino congregacional.
Las palabras del apóstol Pablo en Efesios 3:18-19 forman parte de una oración que empieza en el v.14. Pablo dobla sus rodillas delante del Padre y ora por esos creyentes gentiles en Éfeso. Sus peticiones son varias, pero un de ellas aparece reflejada en los vv.18-19. Pablo ora por conocimiento para esos creyentes. La petición del apóstol se centra en que “seáis plenamente capaces de comprender” y “de conocer”. Por tanto, la petición del apóstol es vista en esas dos menciones de ser capaces de “comprender” y de “conocer”. El apóstol pide a Dios por conocimiento y es que el conocimiento es algo vital en la fe bíblica. La fe bíblica nunca es una fe ausente y carente de conocimiento, nunca es una fe que deja su cerebro en la puerta como si fuese algo incompatible con ella y deja que sean únicamente los sentimientos y afectos aquellos que gobiernen. La fe bíblica surge siempre de la revelación que Dios ha dejado en su palabra, la fe surge por el oír la palabra de Dios (Romanos 10:17). Por tanto, aun y cuando los afectos tienen su lugar siempre regidos por la palabra de Dios, la fe bíblica es una fe racional ya que surge, crece y madura a partir del conocimiento y comprensión de la revelación bíblica. Es por esto por lo que Pablo pide por conocimiento y comprensión. El amor de Cristo que será aquello que deberá de ser comprendido y conocido, no es un amor que será únicamente entendido por medio de sentimientos sino también por medio de conocimiento el cual deberá ser dado no de manera individual sino congregacional.
Pastor Rubén Sánchez
Devocional Semanal - Pastor Rubén Sánchez
Copyright 2013 Iglesia Evangélica Bautista "Piedra de Ayuda" - C/San Eusebio, 54 - 08006 Barcelona. España
Pastor Rubén Sanchez Noguero - Móvil: 610.224.965 - emali: rsanchez111@yahoo.es
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Dios nuestro, gracias por el amor de tu Hijo Jesucristo hacia nosotros. Padre nuestro, te pido que juntamente con todos los santos nos ayudes a comprender y conocer más y más el amor con el que Cristo nos amó para madurar así juntamente con mis hermanos en el gran amor de nuestro Señor y Salvador. Amén.
MARTES
Leer: Efesios 3:14-20
Meditar: ¿Qué es lo que el apóstol Pablo está haciendo en estos versículos? ¿Cómo describe Pablo a Dios? ¿Qué peticiones identificas en la oración de Pablo? ¿Cuál es el resultado de que Cristo por la fe habite en el corazón de todo creyente? Según el v.17 ¿cuál es el cimiento sobre el cual todo creyente debe comprender y conocer el amor de Cristo? ¿Cómo es descrito el amor de Cristo en los vv.18-19? ¿Crees que es posible conocer ese amor? ¿Cómo crees que encaja el v.20 en la petición de Pablo?
Orar: Dios es poderoso para hacer más abundantemente de lo que le pedimos. Siendo así, pide a Dios que él te ayude a conocer y comprender el amor de Cristo conjuntamente con todos tus hermanos en la congregación en la cual formas parte.
MIÉRCOLES
Leer: Juan 13:1-17
Meditar: ¿Cómo es el amor de Jesús por los suyos según el v.1? ¿Cómo se demuestra el amor de Jesús en los vv.2-5? ¿Por qué crees que Jesús dice a Pedro que si él no le limpia no tendrá parte con él? ¿Qué crees que representa el lavamiento de los pies? ¿Cuál es el propósito por el cual Jesús lavó los pies a sus discípulos según los vv.12-17? ¿Cómo crees que el amor de Jesús se relaciona con la limpieza de los pies? ¿Qué ejemplo y aplicación práctica hay para tu vida?
Orar: Bendice a Dios porque el amor de Jesús fue hasta lo último, se hizo siervo de todos para con su propia sangre lavarnos de pecado. Pide a Dios que el amor de Jesús mostrado en el lavamiento de pies y en su sacrificio hacia los suyos sea el amor capaz de ser vivido los unos hacia los otros. Pide a Dios que tu amor sea humilde hacia tus hermanos.
JUEVES
Leer: Juan 13:34-35
Meditar: ¿Por qué crees que el mandamiento es nuevo? ¿Cuál es el estándar del amor los unos hacia los otros? Cómo crees que el evento del lavamiento de los pies ilumina el amor con el que Cristo amó a los suyos? ¿Cuál es el propósito de amarnos como Cristo nos amó?
Orar: Pide a Dios que en su gracia el amor que hay en ti y en tus hermanos sea el amor que fluye de la cruz de Cristo. Pide a Dios que el amor en tu congregación entre hermanos sea de testimonio al mundo de ser discípulos de Cristo.
VIERNES
Leer: Gálatas 5:13-15
Meditar: ¿A qué fuimos llamados como cristianos? ¿Para qué no debe nunca utilizarse la libertad cristiana? ¿Para qué sí debe utilizarse la libertad cristiana? ¿Cuál es el resumen de toda la ley? A la luz del v.15 ¿qué situaciones crees que son aquellas que pueden hacer que no se cumpla el mandamiento del v.14? ¿Cómo crees que esto se relaciona con el amor de Cristo? ¿Cómo puedes aplicar esto de manera práctica a tu vida?
Orar: Pide a Dios que con el amor que has sido amado puedas cumplir la ley y amar a tu prójimo. Pide a Dios que en su gracia él te ayude a usar tu libertad en Cristo para amar al prójimo.
SÁBADO
Leer: Efesios 4:10-16
Meditar: ¿Qué dio Cristo para el perfeccionamiento de los santos y la edificación de la iglesia? ¿Cuál es el fin último de la madurez de la iglesia? ¿Cómo crece la iglesia según el v.15? ¿Qué entiendes que la iglesia crece en la verdad y en amor? ¿Cuál es la función de cada miembro del cuerpo? ¿Cómo se edifica la iglesia según el final del v.16? ¿Qué papel crees que juega el amor en estos versículos.
Orar: Pide a Dios que el crecimiento de la congregación de la cual formas parte sea siempre en la verdad y el amor. Pide que el amor sea el lugar en el que todo miembro trabaje y se edifique así la iglesia en amor.
Leer: Efesios 3:14-20
Meditar: ¿Qué es lo que el apóstol Pablo está haciendo en estos versículos? ¿Cómo describe Pablo a Dios? ¿Qué peticiones identificas en la oración de Pablo? ¿Cuál es el resultado de que Cristo por la fe habite en el corazón de todo creyente? Según el v.17 ¿cuál es el cimiento sobre el cual todo creyente debe comprender y conocer el amor de Cristo? ¿Cómo es descrito el amor de Cristo en los vv.18-19? ¿Crees que es posible conocer ese amor? ¿Cómo crees que encaja el v.20 en la petición de Pablo?
Orar: Dios es poderoso para hacer más abundantemente de lo que le pedimos. Siendo así, pide a Dios que él te ayude a conocer y comprender el amor de Cristo conjuntamente con todos tus hermanos en la congregación en la cual formas parte.
MIÉRCOLES
Leer: Juan 13:1-17
Meditar: ¿Cómo es el amor de Jesús por los suyos según el v.1? ¿Cómo se demuestra el amor de Jesús en los vv.2-5? ¿Por qué crees que Jesús dice a Pedro que si él no le limpia no tendrá parte con él? ¿Qué crees que representa el lavamiento de los pies? ¿Cuál es el propósito por el cual Jesús lavó los pies a sus discípulos según los vv.12-17? ¿Cómo crees que el amor de Jesús se relaciona con la limpieza de los pies? ¿Qué ejemplo y aplicación práctica hay para tu vida?
Orar: Bendice a Dios porque el amor de Jesús fue hasta lo último, se hizo siervo de todos para con su propia sangre lavarnos de pecado. Pide a Dios que el amor de Jesús mostrado en el lavamiento de pies y en su sacrificio hacia los suyos sea el amor capaz de ser vivido los unos hacia los otros. Pide a Dios que tu amor sea humilde hacia tus hermanos.
JUEVES
Leer: Juan 13:34-35
Meditar: ¿Por qué crees que el mandamiento es nuevo? ¿Cuál es el estándar del amor los unos hacia los otros? Cómo crees que el evento del lavamiento de los pies ilumina el amor con el que Cristo amó a los suyos? ¿Cuál es el propósito de amarnos como Cristo nos amó?
Orar: Pide a Dios que en su gracia el amor que hay en ti y en tus hermanos sea el amor que fluye de la cruz de Cristo. Pide a Dios que el amor en tu congregación entre hermanos sea de testimonio al mundo de ser discípulos de Cristo.
VIERNES
Leer: Gálatas 5:13-15
Meditar: ¿A qué fuimos llamados como cristianos? ¿Para qué no debe nunca utilizarse la libertad cristiana? ¿Para qué sí debe utilizarse la libertad cristiana? ¿Cuál es el resumen de toda la ley? A la luz del v.15 ¿qué situaciones crees que son aquellas que pueden hacer que no se cumpla el mandamiento del v.14? ¿Cómo crees que esto se relaciona con el amor de Cristo? ¿Cómo puedes aplicar esto de manera práctica a tu vida?
Orar: Pide a Dios que con el amor que has sido amado puedas cumplir la ley y amar a tu prójimo. Pide a Dios que en su gracia él te ayude a usar tu libertad en Cristo para amar al prójimo.
SÁBADO
Leer: Efesios 4:10-16
Meditar: ¿Qué dio Cristo para el perfeccionamiento de los santos y la edificación de la iglesia? ¿Cuál es el fin último de la madurez de la iglesia? ¿Cómo crece la iglesia según el v.15? ¿Qué entiendes que la iglesia crece en la verdad y en amor? ¿Cuál es la función de cada miembro del cuerpo? ¿Cómo se edifica la iglesia según el final del v.16? ¿Qué papel crees que juega el amor en estos versículos.
Orar: Pide a Dios que el crecimiento de la congregación de la cual formas parte sea siempre en la verdad y el amor. Pide que el amor sea el lugar en el que todo miembro trabaje y se edifique así la iglesia en amor.
Cuando se contempla el universo una de las sensaciones que abruman a uno es la de grandeza. El universo es algo inabarcable de manera exhaustiva por parte de la mente del ser humano. Cada día salen noticias de nuevos descubrimientos que generan sorpresa a los científicos y hace que teorías sobre el origen del universo tengan que revisarse y reformularse nuevamente. El universo tiene unas dimensiones que van más allá del conocimiento humano. La anchura, la longitud, la profundidad y la altura del universo son medidas que muestran la realidad del mismo, no es un ente abstracto e indefinido, pero sus medidas son de tamaño cósmico imposibles de ser abarcadas de manera plena por la mente y el conocimiento humano.
El apóstol Pablo es enfático en mostrar algo a esos creyentes. El apóstol no está interesado en que esos creyentes lleguen a comprender y conocer el gran amor de Cristo de manera individual. No está interesado en que cada uno de ellos diga: “yo tengo un gran conocimiento del amor de Cristo hacia mi vida y mi persona” de manera desligada del resto de santos. El conocimiento del amor de Jesucristo únicamente de manera individual sin tener en cuenta a los demás santos es un conocimiento que nunca podrá llegar a comprender y entender plenamente el amor de Cristo. Pablo les dice “seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos”.
Pablo no ora por una comprensión individualista del amor de Jesucristo, sino un entendimiento que sea dado juntamente con todos aquellos que Jesucristo ha salvado y santificado. No hay duda alguna que esto dota a la iglesia y a todos aquellos santos con los que Dios nos ha puesto en relación por medio de la obra de Jesucristo, de una importancia vital para el conocimiento del amor de nuestro Señor Jesucristo. Es juntamente con nuestros hermanos y hermanas redimidos por la sangre de Cristo dónde podemos comprender y conocer el amor de nuestro Señor. ¿Por qué? Porque si uno piensa en nuestro Dios, su amor nunca fue pensado para ser algo individual o mejor dicho, algo individualista. Si hay algo que Efesios hace énfasis e hincapié es en la naturaleza trina de nuestro único Dios (Efesios 1:3-14). Nuestro Dios es uno, pero es tres personas, Padre, Hijo y Espíritu Santo y el amor de Dios ha sido eternamente mostrado entre las tres personas de la trinidad. Por tanto, el amor en Dios nunca ha sido algo individualista sino conocido y mostrado en la relación que presentan las tres personas de la Trinidad. Quizás por esto, el amor de nuestro Señor Jesucristo nunca podrá plenamente comprenderse de manera individualista, debe ser comprendido juntamente con todos los santos. Es en la congregación de los santos dónde podemos ver, experimentar y comprender el gran amor de nuestro Señor. Conocerlo en la vida de aquellos que él ha salvado, comprenderlo con la exposición de su palabra, entender cómo ese amor del Padre con el que nos hizo aceptos en el Amado aun y saber que éramos pecadores, es mostrado para con todos los santos. Por tanto, un creyente desligado de todos los santos nunca será capaz de comprender el gran amor de Cristo ya que éste se comprende de manera plena juntamente con los santos en Cristo. Por ello la iglesia debe de ser el lugar en el cual el amor de Cristo se manifieste entre los santos y pueda así ser conocido. Un amor que no es abstracto.
Pablo define el amor de Cristo y lo define diciendo que los creyentes conjuntamente son capaces de conocer plenamente el amor de Jesucristo ¿por qué? Porque para el apóstol Pablo el amor de Jesucristo no es un amor impreciso, inconcreto e indefinido, todo lo contrario. El amor de Cristo es un amor bien preciso, concreto y definido, tiene unas medidas específicas “cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura”. Resulta interesante ver lo que el apóstol hace. Por lo general se atribuyen medidas espaciales a objetos físico. Uno puede medir la anchura, longitud, profundidad y altura de un mueble. Uno puede medir las dimensiones físicas de la anchura, longitud, profundidad y altura de un río, un valle pero ¿cómo considerar esas medidas físicas y espaciales a algo que no es físico? ¿Cómo medir el amor de esta manera? Obviamente el apóstol Pablo no está diciendo que uno pude coger el amor de Cristo y delimitar sus dimensiones utilizando una cinta métrica. Ahora bien, así como las dimensiones delimitan la realidad de los objetos para poder ser conocidos en su plenitud, también lo hacen con el amor de Cristo. Lo que Pablo hace hablando de “la anchura, la longitud, la profundidad y la altura” del amor de nuestro Señor es delimitando ese amor para decirnos que el amor de Jesús es algo concreto y definido y por tanto puede comprenderse. El amor de Jesucristo no es algo abstracto e impreciso, es concreto y puede ser comprendido y el evangelio es la muestra de ello. El amor de Jesús se mostró de una manera final en la entrega de su vida en la cruz y el derramamiento de su sangre para el perdón de nuestros pecados. Su amor que fue sacrificial hasta la cruz misma fue un amor que creó la iglesia, la familia de los santos. Por tanto, juntamente con todos los santos podemos comprender plenamente el amor definido de Cristo, ahora bien y aquí está la paradoja de Pablo, comprender este amor es también conocer que el amor de Cristo es el amor que excede a todo conocimiento “y de conocer el amor de Cristo que excede a todo conocimiento”.
Pablo define el amor de Cristo y lo define diciendo que los creyentes conjuntamente son capaces de conocer plenamente el amor de Jesucristo ¿por qué? Porque para el apóstol Pablo el amor de Jesucristo no es un amor impreciso, inconcreto e indefinido, todo lo contrario. El amor de Cristo es un amor bien preciso, concreto y definido, tiene unas medidas específicas “cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura”. Resulta interesante ver lo que el apóstol hace. Por lo general se atribuyen medidas espaciales a objetos físico. Uno puede medir la anchura, longitud, profundidad y altura de un mueble. Uno puede medir las dimensiones físicas de la anchura, longitud, profundidad y altura de un río, un valle pero ¿cómo considerar esas medidas físicas y espaciales a algo que no es físico? ¿Cómo medir el amor de esta manera? Obviamente el apóstol Pablo no está diciendo que uno pude coger el amor de Cristo y delimitar sus dimensiones utilizando una cinta métrica. Ahora bien, así como las dimensiones delimitan la realidad de los objetos para poder ser conocidos en su plenitud, también lo hacen con el amor de Cristo. Lo que Pablo hace hablando de “la anchura, la longitud, la profundidad y la altura” del amor de nuestro Señor es delimitando ese amor para decirnos que el amor de Jesús es algo concreto y definido y por tanto puede comprenderse. El amor de Jesucristo no es algo abstracto e impreciso, es concreto y puede ser comprendido y el evangelio es la muestra de ello. El amor de Jesús se mostró de una manera final en la entrega de su vida en la cruz y el derramamiento de su sangre para el perdón de nuestros pecados. Su amor que fue sacrificial hasta la cruz misma fue un amor que creó la iglesia, la familia de los santos. Por tanto, juntamente con todos los santos podemos comprender plenamente el amor definido de Cristo, ahora bien y aquí está la paradoja de Pablo, comprender este amor es también conocer que el amor de Cristo es el amor que excede a todo conocimiento “y de conocer el amor de Cristo que excede a todo conocimiento”.
¿Cómo puede comprenderse plenamente algo que al mismo tiempo excede todo conocimiento? ¿Cómo comprender y conocer aquello que va más allá de nuestro conocimiento? La paradoja de Pablo en cuanto al amor de Jesús es preciosa. Por un lado, podemos comprender el amor de Jesús juntamente con los santos. Por otro lado, ese amor va más allá de nuestro conocimiento, en último término es un amor que no puede ser limitado y definido plenamente. Lo grandioso de esto es que siempre habrá rincones del amor de Cristo por ser descubiertos, comprendidos y conocidos. Siempre habrá aspectos del amor de nuestro Señor que quedarán por profundizar en ellos y conocerlos. Quizás cuando creamos que ya hemos llegado a conocer y comprender ese amor, entonces se abrirá delante de nosotros otro océano más profundo de ese amor que excederá nuestro conocimiento y en él volveremos a sumergirnos para conocer más y más el amor de Jesucristo.
Aquí en este mundo la iglesia tiene dimensiones preciosas para comprender del amor de su Señor, pero sabiendo que la plenitud de la iglesia llegará cuando Cristo presente a su esposa sin arruga y mancha solo entonces con todos los santos llegaremos a comprender plenamente ese amor de Cristo. ¿Quiere decir esto que en ese día ya habremos llegado a conocer todas las dimensiones del amor de Cristo derramado en nosotros? La respuesta es no.
En la eternidad ese amor seguirá excediendo todo conocimiento por lo que será la eternidad el tiempo - si en la eternidad puede hablarse de tiempo - que necesitaremos para seguir comprendiendo y conociendo todos juntos el amor de nuestro Señor y Salvador. ¿Cuál es el propósito de dicho conocimiento? El ser llenos de la plenitud de Dios “para que seáis llenos de la plenitud de Dios”. El propósito de comprender plenamente el amor de Cristo es para que la iglesia sea llena de la plenitud de Dios. De plenitud a plenitud, en definitiva, conocer el amor de Cristo es para que la iglesia llegue a ser plenamente todo aquello que Dios quiere que sea, plenamente madura en el amor de Cristo Jesús. Por tanto, el conocer el amor de Cristo no es un ejercicio teórico sino que en último término el crecimiento en el conocimiento de ese amor llevará al propósito de que la iglesia sea plenamente madura en el amor de su Señor.
En la eternidad ese amor seguirá excediendo todo conocimiento por lo que será la eternidad el tiempo - si en la eternidad puede hablarse de tiempo - que necesitaremos para seguir comprendiendo y conociendo todos juntos el amor de nuestro Señor y Salvador. ¿Cuál es el propósito de dicho conocimiento? El ser llenos de la plenitud de Dios “para que seáis llenos de la plenitud de Dios”. El propósito de comprender plenamente el amor de Cristo es para que la iglesia sea llena de la plenitud de Dios. De plenitud a plenitud, en definitiva, conocer el amor de Cristo es para que la iglesia llegue a ser plenamente todo aquello que Dios quiere que sea, plenamente madura en el amor de Cristo Jesús. Por tanto, el conocer el amor de Cristo no es un ejercicio teórico sino que en último término el crecimiento en el conocimiento de ese amor llevará al propósito de que la iglesia sea plenamente madura en el amor de su Señor.
