PERSISTE
EN LO QUE HAS APRENDIDO
EN LO QUE HAS APRENDIDO
“Mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados. Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quien lo has aprendido:
y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras,
las cuales te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús"
(2ª Timoteo 3:13-15)
y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras,
las cuales te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús"
(2ª Timoteo 3:13-15)
No es suficiente con aprender algo, es necesario también persistir en ello si no se quiere perder lo aprendido y que sea de manera última de provecho para uno. Puede aprenderse un idioma prácticamente a la perfección, pero como bien dice el dicho inglés “use it or loose it”, es decir “úsalo o piérdelo”. Puede aprenderse a la perfección el funcionamiento de la raíces cuadraras pero si no se persiste en su uso, el paso del tiempo será como las arenas del olvido, aquello aprendido se perderá en las arenas del tiempo. Cierto es que aquello que se aprende desde la niñez queda grabado de una manera especial y duradera en el ser humano pero todo y así, es necesario persistir en aquello que se aprendió y esto es precisamente lo que el apóstol Pablo dijo a su hijo en la fe Timoteo con relación a las Sagradas Escrituras “mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados. Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quien lo has aprendido: y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús” (2ª Timoteo 3:13-15). Las palabras del apóstol Pablo tienen razón de ser, la persistencia en lo aprendido no era cuestión simple sino de eterna importancia para la vida de Timoteo y será de vital y eterna importancia para la vida de todo creyente. Hay tres cosas que llaman la atención en las palabras de Pablo. Primero, la inconsistencia de los tiempos, segundo la necesidad de la persistencia en las Sagradas Escrituras aprendidas y tercero, las Sagradas Escrituras como fuente de salvación en Cristo.
“Pero tú persiste en lo que has aprendido”, las palabras de la persistencia en lo aprendido son introducidas por Pablo con un pequeño pero poderoso “pero”. La persistencia en lo aprendido es dada en contraste a unos tiempos que en sí mismos son totalmente inconsistentes e inestables “mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados”. El apóstol Pablo no dibuja un panorama muy halagüeño de los tiempos que deberá afrontar Timoteo y todo creyente que quiera vivir piadosamente en Cristo Jesús. Pablo muestra que esos tiempos vendrán marcados por dos aspectos fundamentales: (1) la impiedad y falta de verdad y (2) la continua inconsistencia e inestabilidad. ¿Dónde está la impiedad y falta de verdad? Pablo usa una vez la expresión “malos hombres” y tres veces el término “engañar”. Los tiempos descritos por Pablo vendrán marcados por la maldad y de manera muy especial la falta de verdad. El engaño será el pan de cada día y la ausencia de verdad absoluta será el estandarte que esos tiempos enarbolarán de manera significativa. El engaño y la ausencia de verdad, concretamente de verdad absoluta, estarán en el corazón de estos tiempos descritos por Pablo. De la misma manera, la continua inconsistencia e inestabilidad será algo característico de estos tiempos.
“Pero tú persiste en lo que has aprendido”, las palabras de la persistencia en lo aprendido son introducidas por Pablo con un pequeño pero poderoso “pero”. La persistencia en lo aprendido es dada en contraste a unos tiempos que en sí mismos son totalmente inconsistentes e inestables “mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados”. El apóstol Pablo no dibuja un panorama muy halagüeño de los tiempos que deberá afrontar Timoteo y todo creyente que quiera vivir piadosamente en Cristo Jesús. Pablo muestra que esos tiempos vendrán marcados por dos aspectos fundamentales: (1) la impiedad y falta de verdad y (2) la continua inconsistencia e inestabilidad. ¿Dónde está la impiedad y falta de verdad? Pablo usa una vez la expresión “malos hombres” y tres veces el término “engañar”. Los tiempos descritos por Pablo vendrán marcados por la maldad y de manera muy especial la falta de verdad. El engaño será el pan de cada día y la ausencia de verdad absoluta será el estandarte que esos tiempos enarbolarán de manera significativa. El engaño y la ausencia de verdad, concretamente de verdad absoluta, estarán en el corazón de estos tiempos descritos por Pablo. De la misma manera, la continua inconsistencia e inestabilidad será algo característico de estos tiempos.
Pastor Rubén Sánchez
Devocional Semanal - Pastor Rubén Sánchez
Copyright 2013 Iglesia Evangélica Bautista "Piedra de Ayuda" - C/San Eusebio, 54 - 08006 Barcelona. España
Pastor Rubén Sanchez Noguero - Móvil: 610.224.965 - emali: rsanchez111@yahoo.es
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Martyn Lloyd-Jones en una ocasión dijo: “Creo que todo cristiano debería estar avergonzado de no leer toda la Biblia a lo largo del año”. Si tal y como dijo el apóstol Pablo las Sagradas Escrituras es donde todo hombre de Dios y cristiano debe persistir en un mundo que va de mal en peor, sea entonces la gracia de Dios suficiente en nuestra vida para ayudarnos a ello. Señor, ayúdame a persistir en tu Palabra, la cual he aprendido y por tu gracia he sido persuadido de su absoluta verdad. Ayúdame a enseñarla en mi familia para crear así un fundamento sólido en el que persistir. Amén.
MARTES
Leer: 2ª Timoteo 3:1-17
Meditar: ¿Qué contrasta Pablo en estos versículos? ¿Cómo son los malos tiempos descritos por el apóstol? ¿Qué diferencia existe con esos tiempos y con Timoteo? ¿Qué crees que expone el contraste entre los malos hombres y Timoteo? ¿Por qué debe Timoteo persistir en la Sagradas Escrituras? ¿Cómo son descritas las Escrituras según Pablo? ¿Qué importancia tiene para ti que “toda Escritura sea inspirada por Dios”?
Orar: Pide a Dios que en su gracia te ayude a identificar los malos tiempos en que estamos viviendo. Pide que su gracia sea suficiente para que así puedas persistir en la Biblia de manera firme y constante.
MIÉRCOLES
Leer: 2ª Timoteo 3:16-4:2
Meditar: ¿Cómo es descrita la Biblia en el v.16? ¿Qué crees que quiere decir que la Biblia es inspirada? ¿La inspiración afecta a una parte de la Escritura o a su totalidad? ¿Qué funciones tiene la Biblia según Pablo? ¿Qué le pide Pablo a Timoteo? ¿Cómo crees que se relación lo que Timoteo debe hacer en 4:2 con lo que la Escritura hace en 3:16? ¿Qué aplicaciones prácticas puedes sacar para tu vida de estos versículos?
Orar: Bendice a Dios porque la Biblia es palabra de Dios en sí misma. Da gracias Dios por la Biblia y porque es ella la que te enseña, corrige, instruye y te prepara para toda buena obra. Pide a Dios que la predicación y exposición de la Biblia sea algo central en tu iglesia.
JUEVES
Leer: Salmo 19:1-6 Romanos 10:17-18
Meditar: ¿Qué expone el salmista en el Salmo 19:1-6? ¿Qué cuentan los cielos y el firmamento? ¿Qué lenguaje tiene el día y la noche? ¿De donde viene la fe según el apóstol Pablo en Romanos 10:17? ¿Cómo aplica Pablo el Salmo 19 a la predicación del evangelio? ¿Qué relación crees que tiene el Salmo 19 y Romanos 10:17-18?
Orar: Da gracias a Dios porque su evangelio ha sido predicado de manera general así como el mensaje de su revelación es dado de manera general en la creación. Ora para que la fe brote del mensaje del evangelio en aquellos que Dios tenga determinados para salvación.
VIERNES
Leer: Salmo 19:7-14
Meditar: ¿Qué descripciones da el salmista de la ley de Jehová? ¿Qué relación ves entre la Palabra de Dios y sus juicios? ¿Cómo describe el salmista el deseo por la palabra? ¿Qué función tiene la palabra en el salmista? ¿Por qué crees que pide el ser guardado de la soberbia? ¿Qué gratitud final expresa el salmista?
Orar: Pide a Dios que su gracia genere en ti el deseo creciente de la Palabra de Dios. Sabiendo que sus juicios siempre son justos pide que sea la meditación en su palabra la que te haga íntegro.
SÁBADO
Leer: Salmo 119:105-112
Meditar: ¿Qué es la palabra para el salmista? ¿Cuántas veces aparecen los pronombres “tu” y “tus”? ¿Qué crees que indican estos pronombres en el salmo? ¿Qué actitud tiene el salmista con relación a la palabra?
Orar: Da gracias a Dios porque la Biblia es su palabra, él es el primer y último autor de las Escrituras. Inclina tu corazón a cumplir su palabra de continuo en tu vida hasta el fin.
Leer: 2ª Timoteo 3:1-17
Meditar: ¿Qué contrasta Pablo en estos versículos? ¿Cómo son los malos tiempos descritos por el apóstol? ¿Qué diferencia existe con esos tiempos y con Timoteo? ¿Qué crees que expone el contraste entre los malos hombres y Timoteo? ¿Por qué debe Timoteo persistir en la Sagradas Escrituras? ¿Cómo son descritas las Escrituras según Pablo? ¿Qué importancia tiene para ti que “toda Escritura sea inspirada por Dios”?
Orar: Pide a Dios que en su gracia te ayude a identificar los malos tiempos en que estamos viviendo. Pide que su gracia sea suficiente para que así puedas persistir en la Biblia de manera firme y constante.
MIÉRCOLES
Leer: 2ª Timoteo 3:16-4:2
Meditar: ¿Cómo es descrita la Biblia en el v.16? ¿Qué crees que quiere decir que la Biblia es inspirada? ¿La inspiración afecta a una parte de la Escritura o a su totalidad? ¿Qué funciones tiene la Biblia según Pablo? ¿Qué le pide Pablo a Timoteo? ¿Cómo crees que se relación lo que Timoteo debe hacer en 4:2 con lo que la Escritura hace en 3:16? ¿Qué aplicaciones prácticas puedes sacar para tu vida de estos versículos?
Orar: Bendice a Dios porque la Biblia es palabra de Dios en sí misma. Da gracias Dios por la Biblia y porque es ella la que te enseña, corrige, instruye y te prepara para toda buena obra. Pide a Dios que la predicación y exposición de la Biblia sea algo central en tu iglesia.
JUEVES
Leer: Salmo 19:1-6 Romanos 10:17-18
Meditar: ¿Qué expone el salmista en el Salmo 19:1-6? ¿Qué cuentan los cielos y el firmamento? ¿Qué lenguaje tiene el día y la noche? ¿De donde viene la fe según el apóstol Pablo en Romanos 10:17? ¿Cómo aplica Pablo el Salmo 19 a la predicación del evangelio? ¿Qué relación crees que tiene el Salmo 19 y Romanos 10:17-18?
Orar: Da gracias a Dios porque su evangelio ha sido predicado de manera general así como el mensaje de su revelación es dado de manera general en la creación. Ora para que la fe brote del mensaje del evangelio en aquellos que Dios tenga determinados para salvación.
VIERNES
Leer: Salmo 19:7-14
Meditar: ¿Qué descripciones da el salmista de la ley de Jehová? ¿Qué relación ves entre la Palabra de Dios y sus juicios? ¿Cómo describe el salmista el deseo por la palabra? ¿Qué función tiene la palabra en el salmista? ¿Por qué crees que pide el ser guardado de la soberbia? ¿Qué gratitud final expresa el salmista?
Orar: Pide a Dios que su gracia genere en ti el deseo creciente de la Palabra de Dios. Sabiendo que sus juicios siempre son justos pide que sea la meditación en su palabra la que te haga íntegro.
SÁBADO
Leer: Salmo 119:105-112
Meditar: ¿Qué es la palabra para el salmista? ¿Cuántas veces aparecen los pronombres “tu” y “tus”? ¿Qué crees que indican estos pronombres en el salmo? ¿Qué actitud tiene el salmista con relación a la palabra?
Orar: Da gracias a Dios porque la Biblia es su palabra, él es el primer y último autor de las Escrituras. Inclina tu corazón a cumplir su palabra de continuo en tu vida hasta el fin.
Dicen que aquello que se aprende cuando se es pequeño suele perdurar para toda la vida. Es impresionante la capacidad de absorción que tienen los niños. Tal y como en algunas ocasiones suele decirse, los niños son como esponjas que todo lo absorben. Resulta sorprendente cómo son capaces de aprender desde la niñez un idioma de manera prácticamente natural e innata. Sin un método organizado y sistematizado, aprenden una lengua la cual permanecerá con ellos para el resto de su vida si son capaces de persistir en eso que han aprendido. Aprendizaje y persistencia en aquello que se ha aprendido son dos aspectos que prácticamente van de la mano y son inseparables.
El apóstol Pablo menciona que los malos hombres y engañadores “irán de mal en peor”, es decir, no habrá consistencia ni solidez en la cual poder persistir. La imagen del apóstol es una imagen de una continua inconsistencia, inestabilidad y un continuo declive moral en la vida de esos seres humanos. Serán como las arenas movedizas inestables las cuales no tienen ningún tipo de consistencia donde uno pueda persistir de manera sólida, firme y segura. ¿Por qué esto será así? El apóstol lo dice. El declive constante e inestable se dará “engañando y siendo engañados”. Que gran ironía la de estos hombres. Creyendo que engañan a la gente y que son más listos que nadie, al mismo tiempo ellos son engañados por otros y así de manera continua una y otra vez.
¿No es esta la imagen de un mar agitado de falta de verdad que no descansa? El engaño y la ausencia de verdad absoluta hace que no puede haber autoridad absoluta en nada. Sin clamores de verdad absoluta no puede haber clamores de autoridad absoluta y sin una verdad segura, firme y sólida en la que persistir, el ser humano hundido en el pecado es por naturaleza inestable pero constante en su declive espiritual y moral. Nuestra sociedad postmodernista que se caracteriza por la falta de verdad absoluta genera precisamente esta inestabilidad en la vida del ser humano. ¿Cómo puedes persistir en algo que hoy te dicen que es verdad pero mañana puede ya no serlo? ¿Cómo sustentar tu vida de manera firme y sólida si lo que hoy puede parecer un sustento firme mañana ya no lo es? ¿Qué escalador confiaría su vida a un saliente en la roca sin estar seguro que ese saliente es roca sólida y no meramente arenilla que puede deshacerse al tocarla? Nuestro tiempo de falta de verdad absoluta es así. No hay valores morales absolutos, no hay verdades morales absolutas que permitan construir vidas moralmente íntegras en la verdad y no en la mentira, entonces ¿dónde persistir de manera firme? Existe la necesidad de persistir en lo que se ha aprendido.
Pablo le dice a Timoteo “pero tu persiste en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quien lo has aprendido y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras”. Que gran contraste el que marca el apóstol. Frente a un tiempo inconsistente e inestable moralmente por la falta de verdad, Pablo muestra a Timoteo una actitud distinta, “tu persiste”. Existe la posibilidad de encontrar un terreno sólido y firme en el que persistir y anclar la vida de uno. Timoteo debe persistir en “lo que has aprendido y te persuadiste”. En aquello que aprendió Timoteo y de lo que estuvo convencido que era verdad, en ello debía persistir y anclar su vida. La persuasión de Timoteo no era una manipulación sino era la convicción generada por la gracia de Dios a la que Timoteo había llegado. Era la convicción de que aquello que había aprendido era verdad sólida y por tanto en ella podía persistir firmemente y sin temor a que se hundiese debajo de sus pies. Sin duda alguna tal persuasión vino de la gracia de Dios primeramente pero posiblemente fue algo que requirió tiempo. Fue como el agua que filtra poco a poco el terreno y sutilmente nutre las raíces de los árboles para que así se afirmen fuertemente en el terreno y crezcan firmes. Timoteo sabía de quién lo había aprendido y desde su niñez había aprendido las Sagradas Escrituras.
Pablo le dice a Timoteo “pero tu persiste en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quien lo has aprendido y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras”. Que gran contraste el que marca el apóstol. Frente a un tiempo inconsistente e inestable moralmente por la falta de verdad, Pablo muestra a Timoteo una actitud distinta, “tu persiste”. Existe la posibilidad de encontrar un terreno sólido y firme en el que persistir y anclar la vida de uno. Timoteo debe persistir en “lo que has aprendido y te persuadiste”. En aquello que aprendió Timoteo y de lo que estuvo convencido que era verdad, en ello debía persistir y anclar su vida. La persuasión de Timoteo no era una manipulación sino era la convicción generada por la gracia de Dios a la que Timoteo había llegado. Era la convicción de que aquello que había aprendido era verdad sólida y por tanto en ella podía persistir firmemente y sin temor a que se hundiese debajo de sus pies. Sin duda alguna tal persuasión vino de la gracia de Dios primeramente pero posiblemente fue algo que requirió tiempo. Fue como el agua que filtra poco a poco el terreno y sutilmente nutre las raíces de los árboles para que así se afirmen fuertemente en el terreno y crezcan firmes. Timoteo sabía de quién lo había aprendido y desde su niñez había aprendido las Sagradas Escrituras.
El terreno sólido y firme en el que Timoteo debía persistir y no moverse, eran las Sagradas Escrituras que había aprendido. Desde la niñez aprendió la importancia de la Palabra de Dios. Su niñez estuvo marcada por la presencia de las Escrituras en su vida. Fue la fe de su abuela Loida y de su madre Eunice (2ª Timoteo 1:5) y el constante testimonio y discipulado del apóstol Pablo (2ª Timoteo 2:2; 3:10-11) lo que poco a poco por la gracia de Dios generaron esa persuasión en Timoteo de que las Sagradas Escrituras aprendidas son la única verdad absoluta en la que persistir frente a un mundo inestable y lleno de engaño. Nunca puede ni debe obviarse la importancia de enseñar la Biblia a nuestro niños.
La fe que se encuentra en el seno familiar y que explica, expone y comparte la palabra de Dios con los más pequeños, es terreno donde el favor inmerecido de Dios puede obrar para crear persuasión de verdad en cuanto a la Biblia. Es aprendizaje que Dios puede usar para crear esa persuasión de la verdad de la Palabra de Dios para poder más tarde decir “pero tú persiste en lo que has aprendido y te persuadiste”. En ocasiones no es fácil, pero deberíamos convertir a la familia en el lugar donde la fe del evangelio no es únicamente vivida sino también explicada. Las Sagradas Escrituras es la única verdad que no cambia y que es absoluta y firme para anclar nuestra vida frente a un mundo inconstante y que no sabe donde va. ¿Por qué es así? Pablo lo dirá en el v.16 “porque toda Escritura es inspirada por Dios”. Toda la Biblia en su totalidad y en cada una de sus partes ha sido exhalada por el Espíritu del Dios vivo. Por tanto, la Biblia es producto del Dios Creador que en sí mismo es inmutable, es decir, no cambia en su esencia y propósito. La Biblia es la Palabra del Dios que en sí mismo es verdad absoluta. Siendo así, la Biblia es verdad absoluta que no cambia y por tanto, lugar donde puedes construir tu vida. Es la palabra de Cristo quien dijo “cualquiera, pues, que me oye estas palabras y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca” (Mateo 7:24-25). Roca firme en el presente y roca firme para la eternidad.
Las Sagradas Escrituras son las que “te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús”. Ciertamente las Escrituras no salvan, Cristo salva. Únicamente Jesucristo es el salvador y en quien poner nuestra fe para salvación eterna. Ahora bien, esa sabiduría solamente brota de la palabra de Dios. El Espíritu la usa para iluminar un entendimiento oscuro, hacer brotar la fe que viene de oír la palabra y contemplar entonces a Cristo Jesús como el único salvador. Frente a un mundo que va de mal en pero la única persistencia posible en el presente y para toda la eternidad, en la persistencia en las Sagradas Escrituras aprendidas.
Las Sagradas Escrituras son las que “te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús”. Ciertamente las Escrituras no salvan, Cristo salva. Únicamente Jesucristo es el salvador y en quien poner nuestra fe para salvación eterna. Ahora bien, esa sabiduría solamente brota de la palabra de Dios. El Espíritu la usa para iluminar un entendimiento oscuro, hacer brotar la fe que viene de oír la palabra y contemplar entonces a Cristo Jesús como el único salvador. Frente a un mundo que va de mal en pero la única persistencia posible en el presente y para toda la eternidad, en la persistencia en las Sagradas Escrituras aprendidas.
