Copyright 2013 Iglesia Evangélica Bautista "Piedra de Ayuda", San Eusebio, 54 - 08006 Barcelona. España

Pastores Roberto Velert Chisbert -- Telfs- 93.209.83.46 - Móvil: 659.890.253  emali: radiobonanova8@gmail.com
         Rubén Sanchez Noguero - Telfs - 93.209.83.46 - Móvil: 610.224.965   emali: rsanchez111@yahoo.es
LA CRUZ DE CRISTO
MI GLORIA
“Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo,
por quien el mundo me es crucificado a mí y yo al mundo”

(Gálatas 6:14)
Pastor Rubén Sánchez
Devocional Semanal - Pastor Rubén Sánchez
"...y le puso por nombre Eben-Ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová" (1ª Samuel 7:12)
MARTES

Leer: Gálatas 1:1-7

Meditar: ¿Cómo describe Pablo la obra de Cristo en estos versículos? ¿De qué nos ha liberado Cristo y conforme a qué lo ha hecho? ¿Cuál es la sorpresa de Pablo en estos versículos? Según Pablo ¿existe algún evangelio distinto al predicado por él?

Orar: El único evangelio bíblico es el de gracia que tiene como centro la obra redentora de Cristo conforme a la voluntad del Padre. Ora que Dios en su gracia te permita estar siempre fiel sobre el único evangelio que él ha dado. Da gracias a Dios por la realidad que Cristo no redimió conforme a la voluntad no de hombre sino de Dios Padre. 


MIÉRCOLES

Leer: Gálatas 1:9-12

Meditar: ¿Cómo muestra Pablo la importancia del único evangelio? ¿Qué es aquello que hace que el evangelio sea único según los vv.11-12? ¿Cuál es la fuente de la cual proviene el evangelio anunciado por Pablo? ¿Qué entiendes por la expresión “por revelación de Jesucristo?

Orar: El evangelio es divino, su origen es Dios y es dado por Cristo mismo. Ora para que Dios te ayude a entender, meditar y apreciar el evangelio apostólico que él ha revelado en la Biblia. Ora para que Dios te de sabiduría para siempre poder distinguir el evangelio que proviene de él de los evangelios falsos anunciados en el mundo.


JUEVES

Leer: Gálatas 2:15-21

Meditar: ¿Cuál es el punto central y vital de los vv.15-16? ¿Cuál es la base para la justificación de cualquier ser humano? ¿Qué entiendes por la idea de justificar? Según el v.20 ¿dónde se encuentra la identidad de Pablo? ¿Qué define la vida diaria de Pablo, la ley o la fe en Cristo?

Orar: La justificación es la declaración de Dios de declarar perdonado y justo al pecador en base a la obra de Cristo y por medio de la fe solamente en él. La identidad del cristiano se encuentra en su crucifixión juntamente con Cristo. El principio que gobierna tu vida diaria es Cristo y el evangelio. Ora que Dios en su gracia de ayude a vivir cada día y cada situación siguiendo los principios y valores del evangelio.


VIERNES

Leer: Gálatas 3:10-14; 4:6

Meditar: ¿Cómo define Pablo a aquellos que están bajo la ley? ¿Qué es aquello que la ley no puede hacer según el v.11? ¿Cuáles son las dos cosas que están en oposición para la justificación según estos versículos? ¿Qué es lo único que libera de la maldición de la ley? Según el v.14 ¿Cuál es el propósito y el resultado final de la muerte de Cristo en la cruz? ¿Qué identifica el Espíritu en Gálatas 4:6?

Orar: Cristo fue maldito en aquel madero para que tu estando bajo la condenación de la ley fueses libre, perdonado y recibieses la bendición del Espíritu que te identifica como adoptado de Dios. Da gracias a Dios porque la obra de Cristo no solamente te libera sino que de ella fluye la gran bendición de ser adoptado como hijo de Dios. Da gracias al Padre por haberte adoptado como su hijo en Cristo.


SÁBADO

Leer: Gálatas 6:11-16

Meditar: ¿Por qué crees que Pablo dice “mirad con que grandes letras os escribo”? ¿Qué sucede exactamente en los vv. 12-13? ¿Qué es aquello que algunos querían conseguir con los gálatas? ¿Cuál es el centro de gloria de aquellos que se infiltraron ente los Gálatas? ¿Cuál es el centro de gloria de Pablo? ¿Cómo contrasta la gloria de unos con la gloria expuesta por Pablo en el v.14? ¿Qué es lo importante en Cristo según el v.15?

Orar: La cruz de Cristo es la gloria de todo creyente. En ella somos hechos una nueva creación sin distinción de raza, tribu, lengua o nación. Da gracias a Dios porque él ha hecho algo nuevo de ti en Cristo. Pide a Dios que siempre la cruz de nuestro Señor Jesucristo sea tu gloria y la gloria de tu iglesia.
MEDITACIÓN SEMANAL BASADA EN EL DEVOCIONAL
MEDITACIÓN

La cruz de nuestro Señor Jesucristo es gloriosa y es nuestra gloria, esto implica que en ella debemos meditar, sirva el himno de Isaac Watts como instrumento de meditación en la maravillosa cruz.

Al contemplar la grandiosa cruz
donde el Rey de Gloria murió
todo tesoro y orgullo en mí
causan tristeza en mi corazón
Veo en sus manos, cabeza, sus pies
muestra de amor y tristeza en Él
Nunca existió tan sublime amor
que una corona de espinas llevó
Si el universo pusiera a sus pies
sería ofrenda muy pobre de dar
Amor divino, amor sin igual
demanda mi alma, mi ser y mi andar
      ¿Quién querría gloriarse en algo tan vergonzoso como una cruz que servía para infligir la muerte más lenta y agónica en aquel tiempo? Sorprendentemente Pablo encuentra su gloria no en sus logros y victorias “lejos esté de mí esto” sino en la cruz. Lo vital es ver que esa cruz no fue cualquier cruz. Tres cruces fueron clavadas el día que Cristo fue crucificado, las dos cruces de dos ladrones y la cruz de nuestro Señor Jesucristo. Hoy en día el símbolo de la cruz lo han convertido en todo tipo de cosas, Unos plantan cruces amarillas para expresar sus reivindicaciones, otros llevan cruces como colgantes para expresar su religiosidad, ninguna de estas cruces sirve de algo. Pablo define la única cruz que cuenta, la única en la que está su gloria, “la cruz de nuestro Señor Jesucristo”. La cruz que pertenece a Jesucristo y no a otro es aquella que se convierte en el centro de la gloria de Pablo. La gloria de Pablo está centrada, cumplida y canalizada en y a través de la cruz, pero es la cruz no del Señor de Pablo únicamente sino “de nuestro Señor” por tanto, esa cruz es o debería ser el lugar donde todo cristiano debería gloriarse.


      Lo terrible de algo como la cruz, se vuelve un altar de gloria por quien estaba en ella. Jesucristo convirtió esa terrible cruz en el mayor altar de gloria, el lugar donde el Padre glorificó al Hijo y el Hijo glorificó al Padre (Juan 17:1) el lugar donde los solos méritos de Cristo y su única victoria transformaron a pecadores sin gloria en redimidos que eternamente pueden gloriarse no en sus victorias y sabiduría sino en la victoria y sabiduría de la cruz de nuestro Señor Jesucristo. ¿Por qué era la gloria de Pablo y la nuestra? Porque en el Cristo crucificado “el mundo me es crucificado a mí y yo al mundo”. La identificación con la cruz de Cristo supone el fin de la identificación del cristiano con el mundo y viceversa. La idea de Pablo no es el abstraerse del mundo sino más bien que ahora el mundo no es de ventaja y gloria para uno. El mundo, sus ideas, valores y cosmovisión ya no domina al cristiano identificado con la cruz de Cristo. Aquello que controla, domina y tiene absorbido el corazón, alma y mente del cristiano es la cruz de Jesucristo. Todo orgullo y tesoro es contado cómo nada frente a la cruz. Nuestro tesoro es la cruz y allí donde está nuestro tesoro estará nuestro corazón y, por tanto, nuestra gloria. La cruz demanda toda nuestra alma, ser y andar.
      De una manera u otra todo ser humano da gloria a algo. De una manera u otra todo ser humano tiene un centro vital sobre el cual gravita su gloria, honor y honra. Como si de un planeta se tratase, hay ciertas cosas que ejercen una fuerza gravitatoria que atrae y que hace que la gloria de uno orbite sin parar alrededor de ello. Para algunos puede ser su propia persona, para otros puede ser su trabajo, para otros su familia. Sin duda alguna, muchas de las cosas en las cuales el ser humano puede encontrar gloria son totalmente legítimas y no existe problema en ellas, ahora bien, para el cristiano existe algo que debería ser el único centro y elemento de gloria de su vida. El apóstol Pablo lo deja claro en sus palabras escritas de su propia mano a los Gálatas “pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí y yo al mundo”. Pablo expone a los Gálatas que es aquello que resulta su única gloria, aquello que está por encima de todo cuando se trata de gloriarse en algo. Pablo tiene claro que es la cruz de Jesucristo el único altar sobre el cual su gloria es dada. El apóstol primero expresa la fuerte imposibilidad de gloriarse en algo que no sea la cruz de Cristo. Segundo, Pablo establece como la cruz de Cristo es el único lugar donde un debe gloriarse y tercero expone la razón por la cual la gloria de uno está única y exclusivamente en la cruz de Cristo.


      “Lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo”, estás palabras en el argumento de Pablo no aparecen de la nada. Ciertos elementos nocivos se habían infiltrado en la iglesia de Galacia, elementos que sin duda alguna con su legalismo anulaban por completo el glorioso trabajo redentor que Cristo había realizado en la cruz. Desde un buen inicio de su carta Pablo se sorprende como los Gálatas estaban asociándose con un evangelio que no era evangelio en absoluto (Gálatas 1:6-7). Los Gálatas estaban comprando un evangelio apócrifo que anulaba por completo la gracia de Dios, un tipo de evangelio que les decía que la obra de Cristo en la cruz no era suficiente para justificar, es decir, para declarar al pecador perdonado y justo delante de Dios. Los elementos nocivos que habían entrado en la iglesia obligaban a los Gálatas a cumplir las obras de la ley, en especial la circuncisión. Su argumento era, podéis seguir manteniendo vuestra fe en Cristo y esa cruz pero no es suficiente, necesitáis algo más. Al final de su carta Pablo les dice a los Gálatas que aquellos que os obligan a vosotros a guardar todas las obras de la ley ni ellos mismos lo hacen, solamente os obligan no porque crean que eso es bueno sino porque quieren que vosotros seáis su gloria “porque ni aún los mismos que se circuncidan guardan la ley; pero quieren que vosotros os circuncidéis para gloriarse en vuestra carne” (Gálatas 6:13). Que terrible afirmación, la gloria de aquellos que anulaban la eficacia de la cruz se centraba únicamente en gloriarse y estar orgullosos de lo que ellos mismos habían conseguido. Su gloria se centraba en estar orgullosos del gran logro de haber llevado a unos creyentes a circuncidarse, de ahí la expresión “para gloriarse en vuestra carne”. Su gloria era su sabiduría, su gloria eran sus esfuerzos, su gloria era su propia victoria. Frente a esto Pablo rotundamente afirma “lejos esté de mi gloriarme”.
¡Qué gran contraste el de Pablo! Frente a aquellos que se gloriaban en su sabiduría, en sus logros y en sus victorias, Pablo de manera rotunda y tajante establece que su gloria no puede estar en nada de esto. La expresión de Pablo es rotunda, el sentido es “pero ni mucho menos, en ninguna manera para mí me gloríe”. El sentido de Pablo no es que el cristiano no pueda gloriarse, el sentido es algo mucho más glorioso. La gloria de uno de los mayores judíos y fariseos que haya existido ya no estaba más en sus propios logros y victorias y de igual manera nuestra gloria como hijos salvados por Dios nunca más puede ni debe estar en nuestros propios logros y victorias. No hay victoria en nosotros, no hay logros dignos del cielo en nosotros, el único logro y victoria digna se encuentra en la cruz de nuestro Señor Jesucristo “lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo”.


      Si el centro de la gloria de aquellos que se habían infiltrado entre los Gálatas eran sus propios logros y victorias en relación a los Gálatas, el centro de la gloria de Pablo estaba en algo mucho más terrible y glorioso al mismo tiempo, “la cruz de nuestro Señor Jesucristo”. ¿Quién podría tener su gloria en algo tan terrible como una cruz? Cuando uno piensa en el significado de la cruz en el primer siglo debería llevarse las manos a la cabeza solamente de pensar que alguien podría encontrar gloria en un lugar de sufrimiento, agonía y vergüenza pública.