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500 AÑOS DE REFORMA
"SOLA SCRIPTURA"
"Pero tú persiste en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia”
(2ª Timoteo 3:14-16)
      Las palabras del apóstol Pablo a su hijo en la fe Timoteo, en parte, fueron el eco inspirado que volvió a resonar durante la Reforma protestante en 1517. Sola Scriptura fue una de las cinco solas que caracterizó el movimiento de la Reforma centralizado en la figura de Martín Lutero pero precedido y seguido por muchos hombres y mujeres de Dios. La Reforma protestante en la providencia de Dios brotó de las verdades reveladas e inscritas por inspiración en la Biblia y retornó toda la atención nuevamente a la Escritura. Las palabras del apóstol Pablo en 2ª Timoteo 3:14-16 nos recuerdan de la actitud a tener con relación a la Biblia, la razón de la naturaleza de la Biblia y la gloriosa acción de las Escrituras.


      Que maravillosa e importante exhortación la que el apóstol Pablo lanza al joven Timoteo “pero tú persiste en lo que has aprendido y te persuadiste”. Frente a un mundo y unos tiempos donde el engaño y la falta de verdad son la nota predominante (2ª Timoteo 3:13) Pablo establece una actitud distinta para Timoteo y para todo hijo de Dios “pero tú persiste”. Si el mundo se mueve de manera inconsistente e incansable en el engaño y la falta de verdad, tú Timoteo persiste firme, sin vacilar en lo que has aprendido y te persuadiste. Persiste en aquello que has aprendido “sabiendo de quien has aprendido”. ¿Qué es aquello que Timoteo había aprendido y se había persuadido? ¿Qué es aquello en lo que Timoteo debía persistir? Lo que Timoteo había aprendido y sabía desde la niñez eran las Sagradas Escrituras.
Pastor Rubén Sánchez
Devocional Semanal - Pastor Rubén Sánchez
"...y le puso por nombre Eben-Ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová" (1ª Samuel 7:12)
      Las Sagradas Escrituras son el fundamento sólido sobre el cual al apóstol Pablo llama a Timoteo a persistir de manera firme. Un mundo que no tiene verdad es un mundo que no tiene autoridad y, por tanto, es un mundo el cual navega de manera inconstante. Pablo llama a Timoteo a persistir en las Sagradas Escrituras, aquello que es verdad absoluta y, por tanto, tiene una autoridad firme, aquello que no contiene error ni guía a engaño alguno. El llamado de Pablo a Timoteo es el llamado que bien puede aplicarse a todo cristiano y a toda la iglesia de Cristo “pero tú persiste en lo que has aprendido y te persuadiste sabiendo de quién has aprendido y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras”.
       Desde la niñez la iglesia de Cristo ha sabido las Sagradas Escrituras, desde el momento que el cristiano fue renacido por la semilla incorruptible de la palabra de Dios que vive (1ª Pedro 1:23) por el testimonio interno del Espíritu Santo ha sido persuadido de las Sagradas Escrituras, por tanto, “persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste”. La razón de ello es debido a la naturaleza de la Biblia misma.


      El elemento central es la frase “toda Escritura es inspirada por Dios” (v.16). Dios mismo exhaló las Sagradas Escrituras, en todo su conjunto y en todas sus partes. La Biblia es la palabra de Dios en sí misma. Por este motivo al ser la palabra del Dios que en su ser es verdad absoluta, del Dios que no se contradice a sí mismo, del Dios que no guía al engaño, del Dios que es soberano, la Biblia es el fundamento verdadero, confiable, infalible, inerrante y autoritario sobre el cual podemos y debemos persistir. Persistir en otra cosa que no sea la palabra es construir nuestra vida de cristiano o edificar la iglesia sobre la arena. Olvidar o negar la verdad de la centralidad e inspiración de las Escrituras es negar el único medio que guía a salvación y es de edificación para la iglesia. La gloriosa acción de la Biblia es que por la obra del Espíritu que las ha inspirado, las Escrituras son suficientes para hacer al ser humano sabio para salvación “las cuales te pueden hacer sabio para salvación por la fe que es en Cristo Jesús”. La Biblia al completo habla de Cristo y su gloriosa obra de salvación (Lucas 24:27, 44) y es la Biblia lo único suficiente para hacer al necio, sabio para contemplar a Cristo para salvación. Sin persistir en la Biblia ¿de qué Cristo hablaremos? ¿Qué salvación proclamaremos? ¿Qué evangelio anunciaremos? Al mismo tiempo las Escrituras son útiles y suficientes para el hombre de Dios “para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir”. Sin persistir en las Sagradas Escrituras ¿con qué se prepararán los siervos de Dios? ¿Con qué se edificará la iglesia?
MEDITACIÓN

Hoy en día vivimos en un tiempo donde tristemente la inspiración verbal y plenaria de la Biblia, su inerrancia e infalibilidad está puesta en tela de juicio en muchas iglesias. Persistir en la Palabra, en lo que ella es y en lo que ella enseña es innegociable para el cristiano y la iglesia. Nuestro mundo es un mundo donde el engaño prevalece, ante ello debemos persistir en las Sagradas Escrituras. Toma tiempo de meditación en ellas y de oración para que Dios sea aquel que te ayude a persistir en su Santa Palabra.
MARTES

Leer 2ª Pedro 1:19-21

Meditar: ¿Cuál es la actitud que debemos tener frente a la palabra profética más segura? ¿Hasta cuándo la palabra alumbra y qué crees que significa esto? ¿Por qué la Escritura es la palabra profética más segura?

Orar: Pide a Dios que sea él quien te ayude a estar atento cada día a su Palabra como aquella luz que ilumina en lugar oscuro.


MIÉRCOLES

Leer Ezequiel 37; Juan 3:1-8

Meditar: ¿Cuál es la situación del pueblo descrita por Ezequiel? ¿Cómo los huesos vuelven a tener nueva vida? ¿Qué importancia encuentras en la presencia de la Palabra y el Espíritu para la resurrección de los huesos? ¿Qué relación ves con Juan 3: 1-8?

Orar: Pide a Dios que él sea el que vivifique y santifique diariamente tu vida por medio de su Palabra.


JUEVES

Leer Salmo 119:1-8

Meditar: ¿Quiénes son los “bienaventurados los perfectos de camino”? ¿Qué es aquello que debe de ser guardado? ¿Cuál es el resultado de guardar los caminos de Dios?

Orar: Pide a Dios que por su gracia te ayude a guardar y andar en su palabra para estar entre los que son bienaventurados por andar en su palabra. Que el aprender la palabra sea un acto de alabanza con rectitud de corazón.


VIERNES

Leer Salmo 119:81-83

Meditar: ¿En qué espera el salmista cuando su alma desfallece? ¿Qué es aquello por lo que desfallecen los ojos del salmista? Según lo leído ¿Cómo la palabra se presenta como el único aliento frente a momentos de desfallecimiento, soledad y tristeza?

Orar: Pide a Dios que, en momentos de desfallecimiento en tu vida, de soledad y dolor, su palabra sea el bálsamo para tu vida. Que a pesar de las circunstancias Dios oriente tu vida a su palabra como fuente de ánimo, gozo y esperanza.


SÁBADO

Leer Lucas 24:13-53

Meditar: ¿Cuál es el centro y corazón de las Escrituras? ¿Qué es lo que todas las Escrituras proclaman? Según esto, ¿Qué crees que es aquello que siempre debemos buscar en las Escrituras? Según el v.45 ¿Qué es aquello necesario para poder comprender las Escrituras?

Orar: Cristo es el centro de la historia redentora narrada e interpretada en la Biblia, es a él que debemos contemplar con fe cuando leemos y meditamos la Biblia. Pide a Dios que tal y como abrió el entendimiento de esos dos discípulos, él sea quien abra tu entendimiento para comprender la Escrituras y contemplar en ellas a Cristo y su gloriosa obra redentora.
MEDITACIÓN SEMANAL BASADA EN EL DEVOCIONAL